3 ene 2011

Por Todos aquelloss

Por todos aquellos que siendo niños se han ido y han abandonado un mundo de nubes aciagas y de lacerantes horas...Por todos aquellos jóvenes que han partido por caprichos de un cruel y arrebatador destino... Por todos aquellos adultos que desperdiciaron su vida intentando asegurar un futuro incierto que jamás llegaron a ver cumplirse... Por todos aquellos ancianos que disfrutaron de su irrisoria vida sin contemplar un mañana más cercano que el del día siguiente...

Procuramos un buen porvenir haciendo constantes sacrificios para así conseguirlo y por medio, con cada paso, vamos dejando esas ínfimas astillas de recuerdos que jamás volveremos a juntar para así recrear el oxidado espejo de la memoria. Nos dejamos llevar por deseos y ambiciones que nos llevarán a la cima de un mundo cada vez más corrupto e hiriente que afirma una libertad y felicidad infinitas escritas en el aire con susurros constantes. Nada nos ha hecho libres, pues un bebé yace fallecido sin haber contemplado un mañana, sin siquiera llegar a pensar en él. Simples marionetas de papel, simples cuerdas movidas al son de un demiurgo manipulador que parece perseguir propios intereses. ¡Malditos necios! ¿No se dan cuenta? Todo en esta vida es una absurda pantomima que no para de encubrir una muerte cada vez más próxima que está tan segura de su victoria que nos deja toda una vida de ventaja. Aquél pasado abrasador se adhiere a nosotros como hojas otoñales en los fríos suelos de la ciudad, recordándonos en cada minuto que poco a poco se van acabando nuestros suspiros de vida… ¡Oh ego exacerbado de la raza humana! ¿Aún no crees que merezcamos la extinción? Otra bomba ha caído en un colegio, ciento cincuenta y nueve personas han muerto, de entre ellas, el 90% son niños. Una patera llega a las costas Canarias y arrastra consigo doscientos subsaharianos muertos. Dos asesinos irrumpen en una universidad y arremeten contra todos los allí presentes portando armas mortales no solo cargadas con balas blindadas. Todo esto suena tan lejano a nosotros… ¿Acaso no son niños que apenas han vivido para contemplar el cielo? ¿Acaso no son personas que desesperadas se precipitan a la mar como último remedio sabiendo que van a morir? ¿Acaso la gente que allí estudiaba no se merecía un final más digno que morir a manos de dos enfermes cuyos gritos de socorro fueron acallados con continua medicación? ¿Acaso no somos personas que sufrimos y experimentamos el dolor constante que la vida nos depara, como para encima tener que soportar un sufrimiento externo a nosotros mismos, producido por mentes perversas y arcaicas que provocan un hundimiento de la felicidad humana? Nada de eso importa, lo más probable es que, mientras esté escribiendo esto, estén muriendo más personas de las que jamás he conocido o alcanzaré conocer. Aunque una estrella se apague, el resto seguirá brillando, pero todos los planetas que la rodeaban quedarán sucumbidos a un desconcierto constante, tal como aquella familia cuyo miembro se ha ido hacia lo desconocido dejando tras de sí un vestigio marcado por recuerdos y futuras pretensiones.

Por todos aquellos que precipitadamente se han ido de nuestras vidas… Por todos aquellos que fueron perseguidos y asesinados por ser fieles a sus ideas… Por todos aquellos que yacen en fosos comunes sin ser aún identificados… Por todos aquellos cuyas familias y amigos esperan que vuelva por la misma puerta que partió la última vez… Por todos aquellos que echamos de menos en cada momento de nuestras vidas… Por todos aquellos pido, aunque sea, una lágrima que encierre los buenos momentos que hemos pasado juntos.